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   WAB 9-4: TÉCNICA DE LAPAROSCOPIA DE SEGUNDA MIRADA   
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Las adherencias es el problema más importante con el que se enfrenta el cirujano de la pelvis. Como se puede apreciar en la gráfica anexa, donde se demuestran los resultados de un metanálisis de 16 series, la miomectomía fue la intervención pélvica que más se acompañó de adherencias, seguido de la ooforectomía, de allí la importancia de tomar medidas de prevención como las mostradas en la secuencia quirúrgica anterior.

La Barrera INTERCEED está químicamente compuesta de celulosa regenerada oxidada, que demostró no aumentar el crecimiento bacteriano pero reduce la formación de adherencias en cirugía pélvica. Se aplica seca en superficies traumatizadas, luego de una hemostasia meticulosa consistente con los principios de microcirugía, para separar físicamente las superficies expuestas del tejido. Luego de aplicado se fija con pequeñas cantidades de solución salina y permanece en el sitio durante cuatro semanas, tiempo suficiente para que ocurra la reepitelización normal del tejido sin que se formen adherencias. El índice de absorción depende de diversos factores, incluyendo la cantidad usada y el lugar del implante.

El Interceed trabaja muy bien en superficies donde se haya hecho una buena hemostasia o en cirugías donde no suele haber mucho sangrado como en la ooforectomía, salpingolisis, etc. Las miomectomías tienen el inconveniente para el Interceed de ser lesiones húmedas donde es difícil lograr una hemostasia adecuada, de allí que en FERTILAB se utiliza en Interceed en combinación con la omentoplastia. La disminución en la frecuencia de adherencias que se logra con el Interceed se ha estimado en un 50 – 75%.

Las adherencias consisten en un tejido cicatrizal que se desarrolla como consecuencia del trauma quirúrgico y que puede alterar la función de la trompa en el momento de la ovulación. En la laparoscopia de segunda mirada que se hizo 3 meses después de la miomectomía, se pueden apreciar los resultados.

Se puede apreciar como la cicatriz anterior del útero, que se cubrió con epiplón e Interceed® quedó libre de adherencias, mientras que la herida posterior, que se dejó sólo con Interceed®, muestra adherencias importantes entre la trompa y el útero que comprometen el funcionamiento de la fimbria. En el video se puede apreciar con más claridad la técnica quirúrgica y los hallazgos de la laparoscopia.

Laparoscopia segunda mirada de Miomectomía

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