www.fertilab.net Impresión rapida
   EL MALTRATO, LA VIOLENCIA Y EL ABUSO CONTRA LAS LESBIANAS   
   Página 1 de 1   
 
 
Violencia contra
las lesbianas
 

DESCRIMINACIÓN

La discriminación manifestada hacia las lesbianas se considera como "lesbofobia" hacia las lesbianas.  El trabajo de investigación de Amnistía Internacional ha mostrado que la respuesta de la policía ante delitos cometidos contra lesbianas, gays, bisexuales o personas transgénero con frecuencia, es inadecuada y en algunos casos incluso hostil.

La mayoría de estos jóvenes sufren un notable acoso en la escuela y mayor riesgo de violencia en el hogar. Un estudio descubrió que casi la mitad de estos jóvenes terminan teniendo que abandonar sus hogares, debido a la reacción de su familia ante su orientación sexual o identidad de género.

Lesbianas, gays, bisexuales y personas transgénero tienen derecho a la igualdad ante la ley y a que se respeten sus derechos humanos. También son titulares de los derechos a la libertad de circulación, expresión y asociación y a no ser objeto de detención arbitraria, tortura ni malos tratos. Sin embargo, una pareja lésbica no es reconocida como familia ni por el Estado ni por la sociedad, por tanto en este caso, podríamos hablar de maltrato, violencia y abuso sexual.

 

CONDUCTAS VIOLENTAS

Los abusos denunciados incluyen lenguaje racista, hostigamiento, malos tratos, operaciones injustificadas de dar el alto y registrar, detenciones falsas, uso de fuerza excesiva, disparos injustificados y tortura.

En toda clase de conductas violentas puede haber maltrato, violencia o abuso sexual:

 
 
Conductas violentas
 
 
 
 
 
 
  • Maltrato. Este no depende del tamaño o la fuerza de una persona, sino del uso abusivo del poder y el control. El prejuicio instalado en contra de las lesbianas, las puede llevar a suponer y aceptar el hecho de que serán maltratadas en lo económico, emocional, físico y verbal.
  • Violencia. La persona que recibe tratos de violencia necesita ayuda. Existen varios casos que documentan, golpizas que le han ocasionado para castigarlas o "corregirles" la identidad sexual. También existen como ataques a sus propios familiares, las cuales pueden ser forzadas a tener embarazos y matrimonios no deseado en mujeres jóvenes lesbianas.
  • Abuso sexual. Esta es una experiencia y confusa y da mucho coraje admitir que abusaron sexualmente de ella. Es importante decírselo a alguien en quien confías y obtener ayuda para trabajar los efectos que puede tener el abuso. Puede contemplar la posibilidad de hablar con su familia o un consejero entrenado o un grupo de apoyo específicamente destinado a mujeres que han sufrido maltrato, violencia o abuso sexual.

 

LESBOFOBIA

Es un tipo de discriminación homófoba y sexista hacia las lesbianas. El origen de este rechazo podría estar en que las lesbianas rompen el modelo de tradicional del patriarcado, ya que son económica y sexualmente independientes de los varones.

Los problemas de la lesbofobia son los siguientes:

 
 
Lesbofobia


 
  • Policía. En este caso, si alguna lesbiana acude la policía para hacer una denuncia, la mayoría de las veces se expone a reacciones de lesbofobia muy fuertes, sin ser tomadas en cuenta.
  • Denuncias. Se pueden realizar sólo por agresión física, sin considerar casos de violencia psicológica o sexual porque, a juicio de la policía no hay forma de comprobar esa violencia, partiendo de que no es considerada una relación de pareja.
  • Familia. La mayoría de las relaciones lesbianas no siguen para nada el modelo heterosexual, sino que operan con valores totalmente diferentes. Esta situación hace que para una lesbiana sea mucho más difícil para buscar apoyo en el ámbito familiar.
  • Pareja. Si la lesbofóbica es la golpeadora, probablemente su ataque será mucho más violento. Si por otra parte la lesbofóbica es la golpeada, ella justificará el castigo.

En la lesbofibia existe misma situación que da el espacio a la ignorancia de la sociedad en general y la ingenuidad de la comunidad lésbica, respecto de la violencia entre mujeres y se desentiende de su responsabilidad de prevenirla, tratarla y erradicarla, así como de educar a un porcentaje amplio de la ciudadanía.

Las lesbianas se encontraran con el conflicto de la no protección legal frente esta situación, donde no hay ni atención psicológica ni protección especializada. En este sentido, no sólo hay discriminación, sino la negación de las conductas de violencia, lo que conlleva a la no realización de estudios, poder contar con registros estadísticos, etc.

 

SALUD EMOCIONAL Y PSICOLÓGICA DE LA LESBOFOBIA

 
 
Relación lésbica
 

Muchas lesbianas sufren bajo la mirada crítica de los familiares y parientes. Pueden ser amorosas, no monogramas, ser polígamas, vivir en casas separadas por años, estar de acuerdo en resolver los problemas mientras están juntas.

Se preguntan si salir o no del closet, ante quienes y cuándo ocurrirá. Incluso si están de acuerdo en no salir, puede haber diferencias entre dos mujeres acerca de cuanto esconder la relación. La que está dentro del closet puede resentirse con su pareja por recordarle su propia inseguridad y sentimientos de culpa. Ambas mujeres se sentirán deprimidas, irritables e infelices y comenzará a discutir.

Cuando hay diferencias entre dos mujeres, basadas en cosas como la raza, cultura, edad e identidad sexual, estas pueden ser obstáculos adicionales para cruzar. Los sentimientos de dolor y enojo pueden derivar en peleas y preocupación por la estabilidad de la relación. En esta situación, es de vital importancia para las dos mujeres hablar acerca de lo que sienten, y escuchar y entender los miedos e inquietudes de la otra.

Aún cuando las dos mujeres estén totalmente asumidas como lesbianas, la lesbiofobia puede influir negativamente por causa del hostigamiento, miedo al hostigamiento, momentos en que asusta dejarse ver juntas entonces se mantienen aparte, rumores que empiezan a correr, las presunciones que se hagan acerca de una y mucho mas. Agreguemos a esto que es real que las lesbianas nos volvemos críticas y no nos apoyamos en estas diferencias asumiendo que la relación nunca va a funcionar. Esto puede ser aislante para una pareja y ser rechazadas por la mayoría y por sus propias comunidades.

A pesar de que una parte de las amistades acepten a la pareja y este número sea cambiante, todavía es muy duro para las parejas ser doblemente estigmatizadas. Una pareja en esta situación se siente que siempre debe presentar a la otra integrante como perfecta porque todo le mundo está esperando que la pareja falle.

 
 
Sexualidad entre
lesbianas
 
 

La homofobia y la homofobia internalizada pueden ser tan estresantes, que a veces llegan a dañar la salud de una persona en todos sus aspectos. Algunas cosas que puede hacer una mujer para sobrellevar estas presiones:

  • Crear redes de apoyo con amigos.
  • Desarrollar un interés o habilidad personal que la haga sentirse bien consigo misma.
  • Participar en organizaciones comunitarias que trabajen para erradicar la homofobia.

A veces nos cuesta adaptarnos a estas presiones o sobrellevarlas. A algunas personas les hace bien recibir terapia u orientación psicológica, para que las aconsejen durante el proceso de darse a conocer. Puede ser útil hablar con un profesional de la salud mental que trabaje con lesbianas, para que la ayude a descubrir la mejor manera de manejar sus sentimientos o problemas.

La mayoría de las lesbianas van a terapia por las mismas razones que cualquier otra mujer, para hablar sobre problemas en las relaciones, la familia, el trabajo o la escuela, que a veces pueden abrumarla.

 

DERECHOS HUMANOS

 
 
Relación lésbica


 

Las lesbianas son especialmente indecisas en la lucha por sus propios derechos, debido al temor que tienen de sufrir consecuencias negativas, si llaman la atención hacia su identidad sexual o ellas mismas. Aún si ellas están dispuestas a hablar en público, son especialmente vulnerables a ser silenciadas o ignoradas.

Los esfuerzos de Amnistía Internacional (AI) para hacer conciencia sobre y combatir los abusos contra las personas debido a su identidad sexual, son parte de un esfuerzo global para incorporar temas de género y sexualidad en un movimiento de derechos humanos más amplio.

Las lesbianas son raramente incluidas o mencionadas en el discurso de los derechos humanos sobre el género y la sexualidad. En vez de ello, han sido agrupadas con los hombres bisexuales y gay.

Esto ha ocultado la seriedad de los abusos contra los derechos humanos de las lesbianas y el hecho que los mismos son determinados por factores de género e identidad sexual. La capacidad de participación en la vida política, social y cultural comunitaria que tienen las mujeres que resisten las normas de género está severamente limitada por la hostilidad constante y los temores. Estos pueden ser bien fundados porque tienen de volverse víctimas de la discriminación o la violencia, que resultan de las percepciones o realidades existentes sobre sus identidades sexuales.

Para luchar más efectivamente y acabar con la persecución, es crítico examinar las condiciones que crean la discriminación. Factores como el género, origen racial, étnico, de clase, y la identidad sexual, están íntimamente ligados y frecuentemente son el eje principal del incremento en la discriminación contra las mujeres.

Para conseguir las respuestas adecuadas hacia las violaciones de los derechos humanos contra las mujeres, debido a su identidad sexual, requiere mayor escrutinio de cómo las experiencias de género y sexualidad difieren y como las mismas resultan en riesgos diferentes para hombres y mujeres.