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   ¿QUÉ HÁBITOS PUEDEN AFECTAR LA FERTILIDAD?   
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HÁBITOS

 
 
Malos hábitos 
 

La infertilidad está frecuentemente determinada por factores fuera de su control, tales como un trastorno fisiológico innato o una enfermedad. Lo que usted y su pareja quizás no sepan es que hay algunos factores que influyen en la fertilidad que usted sí puede controlar. Una adecuada educación sexual y de medicina reproductiva es, en la mayoría de los casos, mucho más importante que los tratamientos médicos y quirúrgicos sofisticados y costosos para la pareja infértil.

Por ejemplo, fumar puede provocar anomalías menstruales en las mujeres y una ingesta considerable de alcohol puede afectar la producción de esperma en los hombres. Vencer la infertilidad raramente es tan simple como reducir la ingesta de alcohol o no fumar más. Pero controlar algunos elementos de su estilo de vida puede ayudarlo a mejorar sus posibilidades de concepción.

Antes de iniciar cualquier tratamiento se deben proporcionar consejos acerca de los hábitos que pueden comprometer la salud general de ambos miembros de la pareja. Se les debe advertir del efecto negativo que sobre la reproducción tienen los siguientes factores.

 

TABAQUISMO

 
 
Fumando
 

Toda persona que fuma se está suicidando. El promedio de acortamiento de la vida de un fumador es de un 10 a un 15% de su vida. Se estima que cada cigarrillo acorta la vida en unos cinco minutos y que un fumador promedio vivirá entre cinco y siete años menos. El 50% de los fumadores muere de una causa directamente relacionada con el tabaquismo.

El tabaquismo causa un 30% de todos los cánceres y es responsable del 82% de los cánceres pulmonares. Además de los daños directos a la salud, el tabaquismo produce un envejecimiento precoz y pérdida de la condición física, aspecto personal, relaciones interpersonales y calidad de vida.

Los efectos en relación con la fertilidad incluyen los siguientes:

  • Fumar parece acelerar la pérdida de la función reproductiva y pueden avanzar en el momento de la menopausia por uno a cuatro años.
  • El tabaquismo se asocia con mayores riesgos de aborto espontáneo y embarazo ectópico.
  • Los resultados de un metanálisis demostraron que los resultados en los ciclos de reproducción asistida, indican que los fumadores exigen casi el doble del número de intentos de fertilización in vitro para concebir como los no fumadores.
  • Los parámetros del semen y los resultados de las pruebas de función espermática, son generalmente más pobres en los fumadores que en los no fumadores.
  • Los efectos adversos del tabaquismo pasivo y secundario han establecido que en los no fumadores con un exceso de exposición al humo de tabaco, puede tener consecuencias reproductivas tan grandes como los observados en los fumadores.
  • Los médicos pueden facilitar el abandono del hábito de fumar mediante la educación, la vigilancia, el apoyo individualizado y coherente.

 

CAFEINA

 
 
Café
 

La cafeína es una sustancia natural que se halla en las hojas, semillas o frutos de más de 63 plantas en todo el mundo. Los datos publicados muestran que el nivel de consumo per cápita de cafeína del adulto promedio es de aproximadamente 200 a 300 mg diarios. Pese a que en ocasiones se caracteriza a la cafeína como 'adictiva', el consumo moderado de cafeína es seguro y no se la debería clasificar junto con las drogas adictivas de abuso.

Cafeina aditiva. A lo largo del tiempo, algunas investigaciones han señalado que un elevado consumo de café (cuatro o más tazas diarias) se asociaba a situaciones como las siguientes:

  • Uno de los efectos más conocidos de la cafeína es su capacidad de actuar como estimulante, retrasando temporalmente el cansancio, efecto que puede causar insomnio en personas sensibles. Para ellas se recomienda reemplazar el café normal por uno descafeinado.
  • Supuestamente hay mayor riesgo de desórdenes cardiovasculares, con incrementos del colesterol sérico y de ataques cardíacos. Pero en casi todas investigaciones estas han llegado a la conclusión de que la ingestión de cantidades moderadas de cafeína no puede relacionarse con un aumento en los riesgos de padecer enfermedades cardiovasculares.
  • Hay varios estudios que han ligado el consumo de café con cánceres humanos; sin embargo, estos no son concluyentes.
  • Sí parece existir un cierto efecto adverso sobre la movilidad espermática. Por ello es aconsejable para las parejas con problemas de infertilidad que ambos miembros reduzcan o eliminan sus consumos de café y, con mayor razón, los de tabaco o alcohol.
  • Algunos estudios hechos entre la población han demostrado que un alto nivel de consumo de cafeína por parte de mujeres embarazadas, está asociado con una incidencia por encima de lo normal, de nacimientos prematuros, bajo peso al nacer y circunferencia reducida de la cabeza. Basado en datos disponibles, la FDA recomienda a las mujeres embarazadas que eviten la cafeína durante el embarazo.
  • El café expreso contiene ciertos ácidos grasos que podrían inducir a un incremento de la colesterolemia; sin embargo, el aumento de colesterol es resultado de hábitos alimentarios, de una rutina sedentaria y de predisposición a padecerlo.
  • La osteoporosis ocurre con más frecuencia en las mujeres. Los factores de riesgo incluyen el consumo inadecuado de calcio, alto consumo de proteínas, tabaquismo, escasa actividad física, pequeña contextura física, bajos niveles de estrógeno y la edad.
  • Las personas que se han hecho adictas a la cafeína suelen presentar síntomas comenzando de 12 a 24 horas después de la cesación de su consumo. Los síntomas varían en severidad según la persona, pero generalmente incluyen dolor de cabeza, fatiga, apatía y posiblemente ansiedad. Los métodos de destoxificación pueden variar, desde una abrupta abstinencia, hasta retiro gradual, junto con analgésicos que alivien los síntomas.

Cafeína inocente. Dada la importancia de estas imputaciones, es lógico que se haya reinvestigado cuidadosamente en humanos cada una de ellas, mostrándonos las investigaciones más recientes un panorama mucho menos desolador que el anteriormente expuesto.

  • La cafeína a niveles de 300-400 mg por día (3-4 tazas de café) no causa arritmias, no incrementa persistentemente la tensión arterial, ni eleva los riesgos de enfermedades cardiovasculares.
  • La cafeína facilita la actividad intelectual y la creatividad, manteniendo despierto y en estado de alerta a su consumidor. En esta acción está también implicado un incremento de los niveles de adrenalina y noradrenalina.
  • Queda sin comentar la relación entre cafeína y actividad deportiva pero, en general, se puede afirmar la inexistencia de efectos nocivos probados para consumos moderados de cafeína (menos de 400 mg diarios, equivalentes a 3-4 tazas de café), sobre todo si parte de la misma corresponde al café hecho por filtración.
  • Otros estudios han dicho que café puede ser útil para combatir la infertilidad masculina. Aunque esta bebida, muy popular en todo el mundo, goza de mala fama, el estudio asegura que la cafeína mejora la movilidad de los espermatozoides y por lo tanto, aumenta las posibilidades de embarazo.

Conclusión. El café es una bebida universal. Diariamente, se beben en el mundo más de cien millones de tazas. Apreciado por su capacidad para hacer que uno se sienta más alerta, más capaz de realizar tareas mentales o físicas y con menos sueño. Si una taza de café de cafetera contiene unos 100 mg de cafeína, el café filtrado solo alcanza 60, el instantáneo 50 y el descafeinado solo unos 2 mg, mientras que una taza de té cuenta con unos 50, de chocolate unos 10 y un refresco de cola posee unos 40 mg. En Estados Unidos, de acuerdo al informe del Cirujano General, a la Administración de Alimentos y Drogas (FDA), a la Asociación Médica Americana (AMA), y al Consejo de Investigación de la Academia Nacional de Ciencias, el consumo moderado de cafeína no aumenta el riesgo de ninguna enfermedad.

 

 
 
Cerveza
 
 
 

ALCOHOL

La palabra alcohol proviene del árabe “al” (el) y “kohol”que significa “sutil”. El alcohol no es un producto como cualquier otro, ha formado parte de la civilización humana durante miles de años y aunque muchos lo asocian al placer y la sociabilidad, su consumo también conlleva consecuencias perjudiciales.

Se ha señalado que el consumo excesivo, tanto para el hombre como para la mujer, disminuye la tasa de fecundidad. En el hombre puede haber un bajo conteo espermático e incluso puede llegar a provocar reducción de la libido e impotencia temporal, siendo éste un grave impedimento que dificultaría aún más sus probabilidades de concebir un bebé.

En la mujer, interfiere en los ciclos ovulatorios y menstruales, y puede causar el aborto espontáneo o el nacimiento prematuro. Cuando una mujer embarazada bebe alcohol, también lo hace el bebé por nacer. Puede afectar su crecimiento y provocar problemas físicos y de conducta para toda su vida. Uno de los efectos más severos es el síndrome de alcoholismo fetal (SAF) que pueden incluir los siguientes:

 

  • Retraso mental.
  • Defectos congénitos.
  • Características faciales anormales.
  • Problemas de crecimiento.
  • Problemas con el sistema nervioso central.
  • Dificultad para recordar y/o aprender.

El SAF persiste toda la vida y no existe una cura. Hay servicios escolares especiales que pueden ayudar con los problemas de aprendizaje. Las mujeres pueden prevenir el SAF y otros problemas relacionados con el consumo del alcohol si no beben cuando están embarazadas.
 

 
 
Drogas ilícitas

 

DROGAS ILÍCITAS

El consumo frecuente de sustancias como la marihuana y la cocaína produce una disminución de los niveles de gonadotropinas y, por tanto, de alteraciones de la ovulación. El consumo de cocaína tiende a afectar más a los hombres que a las mujeres, aunque se debe tener en cuenta que el hecho de consumir cocaína durante el embarazo podría incrementar significativamente el riesgo de que el feto desarrollara defectos de nacimiento.

En el caso de los hombres, se ha demostrado que el consumo de cocaína provoca un bajo conteo espermático, reducción de la motilidad espermática, y a su vez, puede incrementar la cantidad de esperma con características anormales. Por otra parte, el hecho de consumir cocaína en el momento anterior a la concepción se ha relacionado directamente con los defectos de nacimiento en los bebés.

El conteo espermático masculino podría incluso descender aún más con el consumo de marihuana. Una vez más, la cantidad de espermatozoides que presentarían características anormales se incrementaría como consecuencia del consumo de esta droga.

En el caso de las mujeres, se ha comprobado que el consumo de marihuana podría detener la ovulación y la función del hipotálamo, inhibiendo el funcionamiento hormonal normal. Por otro lado, una serie de investigaciones más detalladas y precisas han demostrado que las mujeres que consumían alcohol y marihuana al mismo tiempo presentaban tasas de fertilidad significativamente deterioradas y mucho menores que las de las mujeres que sólo utilizaban una de las dos sustancias.

 

OBESIDAD

Se ha observado que las mujeres obesas con un índice de masa corporal mayor de 30 kg/m2 y las de bajo peso, con un índice menor de 18,5 kg/m2, pueden tener problemas de fertilidad. Ambos extremos de peso pueden afectar la fertilidad en las siguientes condiciones:

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    Obesidad
     
    Producen alteraciones de la ovulación.
  • Alteran la respuesta a la superovulación con gonadotropinas.
  • Disminuyen la tasa de éxito e procedimientos de fertilización in vitro (FIV) y de inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI).
  • Incrementan las complicaciones del embarazo.
  • Aumentan morbilidad neonatal.
  • Aumentan los riesgos de la anestesia.

La pérdida de peso puede revertir este proceso y mejorar la función ovárica, así como las anormalidades hormonales. Los supresores del apetito se deben reservar para casos de obesidad extrema con índice de masa corporal mayor de 35, porque pueden tener un efecto central que induce a la ausencia de reglas.

Por otra parte, se ha señalado que aquellas mujeres que hacen ejercicios frecuentes y dietas estrictas con el fin de mantenerse delgadas, pueden desarrollar alteraciones ovulatorias y ausencia de reglas. En estos casos, una dieta adecuada es suficiente para restaurar los ciclos menstruales y cuando se asocia a infertilidad, se puede esperar que más del 70% lograrán el embarazo sólo con una dieta que les haga recuperar un índice de masa corporal adecuado. Aquellas pacientes cuyo índice de masa corporal no esté dentro del rango recomendado y que no logren controlar por su cuenta el peso, deben ser referidas al especialista, con el fin de alcanzar ese objetivo antes de continuar con tratamientos.

 

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Ciclismo

DEPORTES

En la mujer la práctica de ejercicios intensos y frecuentes se acompaña de alteraciones en la ovulación por inhibición hipotalámica. En el hombre los ejercicios que impliquen un aumento de la temperatura testicular como ciclismo, automovilismo, etc., van a disminuir la fertilidad. En la medida que aumenta el número de estos factores, que se relacionan con el estilo de vida y que tienen un efecto negativo sobre la reproducción, disminuye la posibilidad de lograr el embarazo. Por lo cual, antes de iniciar cualquier estudio o tratamiento de infertilidad, se debe informar a la pareja para que trate de disminuirlos o eliminarlos.

 

PREVENCIÓN

A pesar de que los avances en el diagnóstico y tratamiento de la infertilidad suceden rápidamente, es en la prevención de estos problemas donde está la verdadera solución. Entre las medidas que se deben tomar se incluyen las siguientes:

  • Prevención de infecciones ginecológicas, porque la enfermedad inflamatoria pélvica es una de las principales causas de infertilidad tubárica. Esto se puede lograr mediante la selección cuidadosa de las parejas sexuales y el uso de métodos de barrera y/o de anticoncepción hormonal. También se debe hacer la pesquisa en casos con factores de riesgo y el tratamiento precoz de gonorrea y clamidiasis.
  • El control del estrés es muy importante por la estrecha relación entre los problemas emocionales, sobre todo de ansiedad, con la infertilidad. Es importante explicarle a la pareja que el ser humano tiene baja fertilidad y que los embarazos se pueden lograr luego de varios meses, aun con tratamientos que mejoren la fertilidad.
  • Corregir el sobrepeso porque puede causar desórdenes ovulatorios.
  • Explicar a las parejas las consecuencias que tiene demorar el embarazo por razones sociales o profesionales hasta después de los 35 años, cuando hay una disminución de la fertilidad.
  • Exaltar las consecuencias del aborto provocado, tabaquismo, alcoholismo, contaminantes ambientales, profesión y deportes sobre la fertilidad de la pareja.
  • Prevenir las adherencias cuando se realiza una cirugía pélvica, mediante las técnicas de microcirugía.
  • Recomendar el uso de vacunas para prevenir enfermedades infecciosas como la parotiditis, hepatitis, varicela y rubéola, que pudieran interferir con la capacidad reproductiva o afectar a la madre y al feto durante el embarazo.
  • Ofrecer a los pacientes que van a recibir radioterapia y/o quimioterapia la posibilidad de almacenar espermatozoides, óvulos y/o embriones según sea el caso.