www.fertilab.net Impresión rapida
   RELACIÓN ENTRE LA ALIMENTACIÓN Y DESARROLLO DE UN EJERCICIO   
   Página 1 de 1   

Comer sano
es importante

Cuando realizamos actividades físicas nuestro organismo puede sufrir trastornos y desequilibrios en cuanto a su funcionamiento (huesos, músculos, hidratación…).

Reparar estos pequeños desperfectos, y evitar que se conviertan en un mal mayor, nos obliga a revisar nuestra alimentación a fin de ofrecerle al cuerpo aquellos nutrientes que sustituyan las pérdidas y le permitan establecer, de nuevo, su equilibrio.

Consultar con un médico y con un entrenador, dependiendo del tipo y de la intensidad de la actividad física a realizar, son los primeros pasos a seguir. Ello nos garantizará mantener la salud y ejercitarnos adecuadamente.

En la elaboración de una dieta balanceada deben estar presentes los siguientes alimentos:



ALIMENTOS FORMADORES
Colaboran en la construcción y reparación de músculos, huesos, sangre, tejidos.
Contienen proteínas.
Leche y sus derivado (con excepción de la mantequilla y la crema de leche pues pertenecen al grupo de las grasas).
Carnes, pescado, aves, huevos, frijoles, lentejas, maní, soya…
ALIMENTOS REGULADORES
Contienen los nutrientes que regulan el funcionamiento del organismo (vitaminas y minerales), favorecen la visión y conservan la piel saludable.
Hortalizas y verduras (zanahoria, pimentón, lechuga, remolacha, etc.).
Frutas:
Ricas en vitamina C: guayaba, mango, naranja, limón…
Ricas en carotenoides: mandarina, papaya, zapote…
Cambur y melón.
ALIMENTOS ENERGÉTICOS
Dan vigor y energía. Son el principal combustible del organismo, conservan el calor y la temperatura corporal. Contienen carbohidratos y grasas. Cereales: arroz, maíz, trigo, cebada, avena, harina y sus derivados.
Tubérculos: plátanos y azúcares.
Aceites y grasas de origen animal.