ENAMORAMIENTO
Es un estado emocional surcado por la seducción, alegría, atracción y satisfacción de encontrar a otra persona, que es capaz de comprender y compartir tantas cosas como trae consigo la vida. Es un estado alterado de conciencia, es decir, que la consciencia, las actitudes, las emociones quedan fuera de control. Es una magia que lleva a la persona enamorada, a tener una serie de cambios en la percepción de las cosas en forma importante.
El enamoramiento es un proceso difícil de entender, es más fácil sentirlo pero es sólo es una etapa de la fantasía que, por más hermoso y maravilloso que sea, es aún demasiado frágil y quebradizo, como "globos de colores" que animan la fiesta, pero que se desinflan con demasiada facilidad.
En cuando alguien siente que está sexualmente atraído por otra persona y se siente enamorado, de inmediato piensa que es "amor", pero es un error considerarlo así, porque hay que hacer una diferencia entre amor y enamoramiento.
QUÍMICA DEL AMOR
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Química del amor
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El enamoramiento es un desencadenante de la experiencia amorosa, puede sentir sensaciones de frío o calor con sudoración y enrojecer ante la presencia de la persona amada o con solo oír su nombre.
Puede tener un pulso acelerado y ponerse a temblar, con ansiedad en el estómago y alteración de la percepción del tiempo. Tiene el impulso de frecuentar los lugares por donde pasa, hablar continuamente de él/ella, de sus características físicas, de su personalidad. Tenemos deseos de conocerla y de que nos conozca, de sus deseos, simplemente mirándolo o escuchando su voz. Vivir el enamoramiento es como estar en otro mundo.
Es vivir en la fantasía, incluso podemos llegar a admirar a la persona. Se pierde la noción de las propias necesidades, no siente hambre, sed, frío, calor o sueño y puede pasar horas y horas al lado del objeto pensando en la otra persona, preocupándonos de cómo esté o qué estará pasando.
El pensamiento se convierte en obsesivo, "...no puedo dejar de pensar en él/ella..." tiene ansiedad de estar junto él/ella y al estarlo, no querer separarse. Está pendiente de una palabra suya de afecto, de una sonrisa, una mirada, una llamada de teléfono. Cuando una persona está enamorada es fácilmente reconocida por los otros a través de todo un lenguaje corporal, la forma de mirar al otro, de escucharle, de sonreírle.
El enamoramiento puede manifestarse bruscamente como un “flechazo” o como la transformación de una relación que se inició como amistosa. Aparecerá una gran atracción sexual y tendrá sentimientos positivos y gratificantes, cuando todo va bien, pero se transformarán en negativos, si no todo va bien.
El enamoramiento dura mientras se está caminado como por las nubes. Una vez se aterrice y se descubran los defectos de la otra persona o se evidencie que uno de los dos no satisface las expectativas del otro, la relación de enamoramiento entra en crisis, tiende a acabarse y comienza el desamor... una sensación bastante frustrante.
...es tan fácil enamorarse y es tan difícil amar...
CONSECUENCIAS
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Consecuencias | |
El enamoramiento es muy común entre los jóvenes, principalmente en la etapa de la adolescencia. Sin embargo, pero puede suceder a cualquier edad, la única condición para que ocurra es estar predispuesto y abierto a lo que suceda. Es un proceso que en la mayoría de las parejas dura más o menos un año, aunque enamoramiento intenso puede dura algunas semanas o tal vez unos pocos meses.
En la mayoría de los casos desaparece tan rápidamente como llegó o cuando la realidad se impone a las fantasías y se comienza a ver al otro como realmente es. Súbitamente todos los defectos salen a la luz y el loco amor se transforma en desprecio, rencor o indiferencia hacia la misma persona, que apenas unas horas atrás era la luz de sus ojos.
No son pocos los embarazos que se han producido como consecuencia de estas breves e intensas relaciones y también múltiples son las rupturas de matrimonios o parejas, cuando uno de los miembros se vio involucrado en un enamoramiento pasajero. Cuando ese enamoramiento es compartido por las dos personas, puede dar lugar a una relación maravillosa y una vez que termina deja paso a sentimientos reales y duraderos.
ENAMORAMIENTO VS. AMOR
Cuando estamos enamorados nos parece que nuestra pareja es perfecta y la persona más maravillosa del mundo. Muchas personas que son adictas a estar enamoradas, terminan sus relaciones cuando la magia de haber conocido alguien nuevo desaparece.
Cuando empiezan a ver defectos en la otra persona y a darse cuenta que no es tan perfecta como pensaban, es la diferencia entre enamoramiento y el amor.
El amor es firme como roca, el enamoramiento es frágil como una vasija de barro y está basado en la realidad, no en un sueño de encontraste con tu príncipe azul o a tu princesa encantada. El verdadero amor no es ciego.
Empezamos a amar cuando dejamos de estar enamorados. El amor requiere conocer a la otra persona, requiere tiempo, requiere reconocer los defectos del ser amado, requiere ver lo bueno y lo malo de la relación. No quiere decir que enamorarse no es bueno, al contrario es maravilloso. Sin embargo es solo el principio.
EVOLUCIÓN DEL ENAMORAMIENTO
FINAL O CONSOLIDACIÓN
Ruptura de la relación
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El enamoramiento dura un período más o menos largo, tras el cual pueden suceder dos cosas: o concluye o se transforma. Se va pasando a un mayor contacto con la realidad, empezamos a ver al amado/a, también en aquellos aspectos que no nos gustan y que puede suceder lo siguiente:
El enamoramiento concluye y con él la relación
Cuando dejamos de idealizar a la persona amada, observamos que dista mucho de lo que era en nuestras fantasías, de nuestras expectativas de relación. Nos damos cuenta entonces de que tenemos valores y formas de ver la vida muy diferente. Desaparece la magia, la vibración de los cuerpos y nos desenamoramos.
Esto es lo más frecuente tras la mayoría de los enamoramientos. Son vividos como una experiencia hermosa, intensa, pero fugaz. Especialmente en la adolescencia, donde se ensayan los caminos amorosos y se construye la propia identidad. Muchos enamoramientos surgen para concluir la adolescente, formando parte del aprendizaje de la vida.
Cuando el enamoramiento se transforma en una relación consolidada
Desaparece la idealización, pero la persona que descubrimos nos llena, nos gusta y decidimos compartir nuestra vida con ella. Desaparecen muchas de las reacciones físicas típicas de la etapa del enamoramiento, dando paso a un amor profundo y comprometido, en el que los dos miembros de la pareja se preocupan el uno por el otro y se cuidan mutuamente.
El amor y el desamor forman parte de la vida, necesitamos, pues, vivir estas experiencias aprendiendo de ellas, tomándolas como oportunidades que nos ofrece la vida, en el proceso de nuestro desarrollo como personas.
No debemos olvidarnos de que las crisis nos ayudan a renovarnos, a generar nuestros propios recursos, que nos ayudan a afrontar la vida de una forma más positiva y feliz. No tenemos porque vivir la ruptura amorosa como un fracaso, sino como una evolución hacia algo más positivo, aprendiendo a confiar en nosotros mismos y en el propio proceso de la vida.
DESPUÉS DEL DESAMOR
Cuando acaban las emociones positivas ante el encuentro con el otro, cuando la rutina y la vida en común, apagan la comunicación y el interés por el otro. Cuando uno tiene una sensación incluso de extrañeza ante la presencia del otro, es cuando comienza el desamor, que también está íntimamente unido a la falta de deseo sexual, síntoma principal del desamor.
Cuando el desamor llega a nuestra vida como pareja, es mejor separarse y convertir la relación en un "amor amistoso". Quizás sea la mejor solución, aunque podría tener arreglo si sentimos la necesidad de arreglarlo, en ese preciso momento es que existe el diálogo sobre el tema.
Si notamos que sobreviene un sentimiento de lástima por el otro o que nos nace un sentimiento de no hacer daño, entonces es que nos hemos encontrado con el desamor. Seguimos queriendo a esa persona, pero no amándola. Hay personas que necesitan enamorar continuamente y cuando lo han conseguido el interés por la conquista desaparece.
Hay una búsqueda constante de ser querido o de reconocimiento social, sobre todo en los varones ya que supone prestigio, aunque también puede ser producto de una mala relación con ese sexo. Seducir para abandonar, es una manera de castigar. Otras personas buscan inmediatamente alguien a quien volver a idealizar. No se puede soportar la idea de estar solo/a, necesitan a alguien para que continuamente les apoye, tienen miedo a no saber qué hacer por ellos/as mismos/as.
Uno se va sintiendo cada vez más independiente, menos triste, menos resentido y va encontrando nuevas formas de triste disfrutar. Es el momento de recuperar a los amigos/as, quizás algo abandonados, de volver a las aficiones o de crearse otras nuevas. Poco a poco la herida se va cerrando y uno vuelve a recuperar la confianza en sí mismo/a, abriéndose a nuevas relaciones!!!